lunes, 15 de noviembre de 2010

Un punto ye ye

La y griega tiene su punto. Y lo digo en el sentido literal. Cuando se utilizaba en los manuscritos medievales una y, se solía escribir encima de ella un punto para que, si la pluma no hacía un trazo grueso de la línea de caída de la y, no se confundiera a ésta con una V. Así puede verse en esta frase de un manuscrito del XV (del pueblo de ysrrael):Desde el alfabeto griego, el alfabeto romano introdujo la letra ipsilon (Y) que se denomina habitualmente en España y griega. En la nueva ortografía de la Academia, que se está cerrando ahora y que sustituirá a la última, de 1999, se propone que el nombre de esa letra sea de ahora en adelante ye, según es común en América. La controversia en torno a esta medida ha estallado, como se puede ver en la prensa, y se une a otras propuestas que, a la inversa, tienen más efecto en América que en España, como la eliminación del nombre “be corta” para la uve (v).
Desde la primera ortografía, en 1741, la Real Academia Española ha propuesto cambios diversos en la escritura: desaparecieron ç, th, ph, se han dictado nuevas normas de acentuación y mayúsculas y se ha modificado la escritura de algunas palabras. Algunas normas también afectaron a la escritura de y: en 1815 la RAE fijó que y sólo se usaría como vocal a final de palabra en secuencias de diptongo (soy, rey y ya nunca más Ysrael, leydo, etc). Otras iniciativas no han tenido éxito, como el uso de acento circunflejo ^ en español, por ejemplo.
Somos los usuarios del idioma quienes dispensaremos de éxito o fracaso a estas propuestas. Yo tengo una, que lanzo tarareando de fondo la música de la chica ye-ye. Por esa pátina extranjera que no parece haber perdido, por quienes se llaman Fátima, Loli o Mari y firman Faty, Loly o Mary; por el Lancia Ypsilon a quien nadie llamará Lancia Ye ni Lancia Y griega; por esa autopista Y que une tres ciudades asturianas, y, en definitiva, por ese punto que tiene la Y, yo digo que la llamemos Y griega ye-ye. Deja tu comentario...
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La y griega tiene su punto. Y lo digo en el sentido literal. Cuando se utilizaba en los manuscritos medievales una y, se solía escribir encima de ella un punto para que, si la pluma no hacía un trazo grueso de la línea de caída de la y, no se confundiera a ésta con una V. Así puede verse en esta frase de un manuscrito del XV (del pueblo de ysrrael):Desde el alfabeto griego, el alfabeto romano introdujo la letra ipsilon (Y) que se denomina habitualmente en España y griega. En la nueva ortografía de la Academia, que se está cerrando ahora y que sustituirá a la última, de 1999, se propone que el nombre de esa letra sea de ahora en adelante ye, según es común en América. La controversia en torno a esta medida ha estallado, como se puede ver en la prensa, y se une a otras propuestas que, a la inversa, tienen más efecto en América que en España, como la eliminación del nombre “be corta” para la uve (v).
Desde la primera ortografía, en 1741, la Real Academia Española ha propuesto cambios diversos en la escritura: desaparecieron ç, th, ph, se han dictado nuevas normas de acentuación y mayúsculas y se ha modificado la escritura de algunas palabras. Algunas normas también afectaron a la escritura de y: en 1815 la RAE fijó que y sólo se usaría como vocal a final de palabra en secuencias de diptongo (soy, rey y ya nunca más Ysrael, leydo, etc). Otras iniciativas no han tenido éxito, como el uso de acento circunflejo ^ en español, por ejemplo.
Somos los usuarios del idioma quienes dispensaremos de éxito o fracaso a estas propuestas. Yo tengo una, que lanzo tarareando de fondo la música de la chica ye-ye. Por esa pátina extranjera que no parece haber perdido, por quienes se llaman Fátima, Loli o Mari y firman Faty, Loly o Mary; por el Lancia Ypsilon a quien nadie llamará Lancia Ye ni Lancia Y griega; por esa autopista Y que une tres ciudades asturianas, y, en definitiva, por ese punto que tiene la Y, yo digo que la llamemos Y griega ye-ye. Deja tu comentario...

10 comentarios:

MJGF dijo...

¡Oh! ¡Cómo me ha gustado esta entrada! Me has tocado el punto con la ortografía -que, por cierto, no creo yo que la Nueva vaya a ser tan revolucionaria como la pintan. Mucho lirili, pero poco larala-. Hablando de puntos sobre las íes (griegas o latinas), con los signos de puntuación también pasa esto de los nombres, por ejemplo: interrogación / interrogante/ punto de interrogación; admiración / exclamación; signo de división / guion / raya, etc. Y de su uso, ya, ni hablamos.
MJ

Lola Pons dijo...

Pero lo más exótico es sin duda que la diéresis se llame también "crema"... Un saludo y gracias por tu lectura

Miriam dijo...

Genial la entrada con ese punto inicial de la "y" que desemboca al otro punto, el del final.

Hace unos días, un profesor de la universidad comentaba que veía normal y justo que a la "Y griega" se le llamase "ye" puesto que ésta, en español, tiene un uso mayor como consonante que como vocal. Pero sigo sin verle rendimiento al cambio. Si los nombres de las consonantes tuvieran que ser designados según aparezcan más o menos con una vocal u otra, por decir: la "zeta" tendría que ser "za" o la "hache" precisamente no se nombraría.

Luego es posible que la Real Academia esté dejando de dar esplendor.

Lola Pons dijo...

Creo que la RAE está atendiendo a que en América está muy extendido el uso de YE frente al de Y griega (el enlace que pongo en la entrada tiene unas palabras de Humberto López Morales muy interesantes alrespecto), no parece que el mandato esté basado tanto en el uso fonético de la y griega. Como tú misma dices, si se aplicara ese criterio para los nombres de letras tendríamos que redenominar todo el alfabeto.Saludos y gracias por tu comentario.

Anónimo dijo...

Secundo la moción.

A mí, de entre las nuevas normas, la que más me fastidia (no sé por qué) es la que afecta a la distinción de solo (adjetivo) frente a sólo (adverbio). Me parece pertinente el mantenimiento de la tilde diacrítica, porque a menudo encuentro contextos en los que se produce una molestísima ambigüedad.

Además, hay escritores académicos como Javier Marías que mantienen en sus libros la distinción de sólo y solo.

Lola Pons dijo...

Gracias por secundar mi moción. ¿Y qué te parece lo de que w sea "be doble"? Por cierto, que justamente la Universidad de Oxford, tan vivida por Javier Marías, llama "SOLO" a su catálogo de bibliotecas (Search Oxford Libraries Online). Un saludo

Patricia dijo...

En primer lugar enhorabuena por este blog y sus seguidores. Ya hace varios años que nuestros caminos se cruzaron; fue en aquellas clases de lengua en la Facultad de Comunicación de Sevilla, donde tanto aprendí y tanto disfruté con usted como profesora.
Al igual que Iván y usted misma, no me parece del todo lógica esa supresión de la tilde en solo (adverbio), tilde que precisamente tanta ambigüedad ha suprimido en ciertos casos en los que el contexto no facilitaba la interpretación. Al igual que no entiendo en qué se han basado para implantar esta nueva norma de "no acentuación" en los pronombres demostrativos. Se supone que el hablante y su uso de la lengua son los que determinan las reformas que los académicos llevan posteriormente a cabo. En este sentido, ¿qué beneficios encuentra el hablante en estos cambios?

Me alegro mucho haberle encontrado en este mundo de la web 2.0.

Un afectuoso saludo,
Patricia

Lola Pons dijo...

Hola Patricia. Gracias por tu visita a la casa virtual de tu vieja profesora (lo de 2.0 no sé muy bien qué es, tampoco estoy tan ducha en estas cosas...). Veo que los hablantes nos seguimos aferrando a poner la tilde incluso aunque nos orienten a no ponerla. Un saludo.

Anónimo dijo...

Estamos en el Máster y te queremos dar la enhorabuena
ULPGC

Lola Pons dijo...

¡Gracias, amigos canarios!

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