viernes, 9 de noviembre de 2018

Libros para niños sobre lengua

Tengo un recuerdo estupendo de las lecturas que disfruté cuando era pequeña; devoré los libros infantiles propios de la generación EGB. Fui de jovenzuela una voraz lectora de novelas y novelones. Luego vino la poesía. Siempre he encontrado libros a mi medida, propios del tiempo y del lugar en que me encontraba. Leí lo que quise y cuando quise. No me gusta que se obligue a los niños a leer pero recomiendo que en los cumples y las Navidades haya entre la orgía de juguetes algún libro. Siempre es posible encontrar un libro a la medida de un niño.Aquí os paso una selección de cinco libros infantiles sobre lengua y escritura que me han parecido interesantes.
Quiero empezar por los álbumes ilustrados porque esta semana en Sevilla se está celebrando la semana del álbum ilustrado y tenerlos por casa es gozoso para la vista y el tacto. Llegué a ellos a través de la autora e ilustradora sevillana Raquel Díaz Reguera, que tiene una bellísima colección de ellos, todos buen regalo para grandes y chicos (mirad aquí). Entre los que se dedican específicamente a lengua, os recomiendo La gran fábrica de las palabras (Agnès de Lestrade  y Valeria Docampo, en Tramuntana) cuyo contenido podéis ojear porque está narrado en este vídeo.

Los cuadernitos de escritura creativa de El Hematocrítico (son varios, mirad aquí) ayudan a poner a los niños ante el reto comunicativo de escribir con libertad. Y eso no lo suelen hacer los programas educativos escolares (por eso escribí este artículo de opinión hace tiempo). Creo que alguien que escribe y habla con habilidad de adaptación a los registros, capacidad de convicción y riqueza léxica va a tener algo más fácil ganarse la vida. Y eso se empieza a aprender de pequeño.
Para niños a los que le gusta escribir y dibujar sus propias historietas recomiendo este libro de la fantástica serie de Usborne. Además, es muy asequible de precio.
De Jerónimo Stilton (Geronimo Stilton en los títulos) y de su familia ratonil hay una colección extensísima de títulos; este tiene gracia porque explica muy bien el surgimiento de la imprenta y su historia interna, algo que de vez en cuando tenemos que explicar en clase al hablar de edición de textos. Lo cierto es que los libros de ciencia para niños exponen qué es un cohete o una polea pero no suelen recordar ese gran invento que fue la imprenta.
Y por último, una recomendación para los más chicos. Para aprender a leer hay miles de libros, pero la gracia de la colección de Bruño Las divertidas aventuras de las letras es que no se presenta como una cartilla ni un libro de texto. Las letras se muestran en historias rimadas, con sentido y detalles en que detenerse. Creo que por eso ha sido un exitazo editorial en los últimos años. Hay varios libros nacidos a partir del original (este, para mí el mejor). A partir de él, han creado un conjunto de material adicional también muy bueno, como el de la foto (escrito en mayúsculas, lo que facilita mucho las cosas).
Y para terminar, dejadme que haga algo tan pesado como aconsejar: consumid cultura, id a las librerías, asistid a las actividades de las bibliotecas. O regamos el tejido cultural o tendremos ciudades secas.
Leer más
Tengo un recuerdo estupendo de las lecturas que disfruté cuando era pequeña; devoré los libros infantiles propios de la generación EGB. Fui de jovenzuela una voraz lectora de novelas y novelones. Luego vino la poesía. Siempre he encontrado libros a mi medida, propios del tiempo y del lugar en que me encontraba. Leí lo que quise y cuando quise. No me gusta que se obligue a los niños a leer pero recomiendo que en los cumples y las Navidades haya entre la orgía de juguetes algún libro. Siempre es posible encontrar un libro a la medida de un niño.Aquí os paso una selección de cinco libros infantiles sobre lengua y escritura que me han parecido interesantes.
Quiero empezar por los álbumes ilustrados porque esta semana en Sevilla se está celebrando la semana del álbum ilustrado y tenerlos por casa es gozoso para la vista y el tacto. Llegué a ellos a través de la autora e ilustradora sevillana Raquel Díaz Reguera, que tiene una bellísima colección de ellos, todos buen regalo para grandes y chicos (mirad aquí). Entre los que se dedican específicamente a lengua, os recomiendo La gran fábrica de las palabras (Agnès de Lestrade  y Valeria Docampo, en Tramuntana) cuyo contenido podéis ojear porque está narrado en este vídeo.

Los cuadernitos de escritura creativa de El Hematocrítico (son varios, mirad aquí) ayudan a poner a los niños ante el reto comunicativo de escribir con libertad. Y eso no lo suelen hacer los programas educativos escolares (por eso escribí este artículo de opinión hace tiempo). Creo que alguien que escribe y habla con habilidad de adaptación a los registros, capacidad de convicción y riqueza léxica va a tener algo más fácil ganarse la vida. Y eso se empieza a aprender de pequeño.
Para niños a los que le gusta escribir y dibujar sus propias historietas recomiendo este libro de la fantástica serie de Usborne. Además, es muy asequible de precio.
De Jerónimo Stilton (Geronimo Stilton en los títulos) y de su familia ratonil hay una colección extensísima de títulos; este tiene gracia porque explica muy bien el surgimiento de la imprenta y su historia interna, algo que de vez en cuando tenemos que explicar en clase al hablar de edición de textos. Lo cierto es que los libros de ciencia para niños exponen qué es un cohete o una polea pero no suelen recordar ese gran invento que fue la imprenta.
Y por último, una recomendación para los más chicos. Para aprender a leer hay miles de libros, pero la gracia de la colección de Bruño Las divertidas aventuras de las letras es que no se presenta como una cartilla ni un libro de texto. Las letras se muestran en historias rimadas, con sentido y detalles en que detenerse. Creo que por eso ha sido un exitazo editorial en los últimos años. Hay varios libros nacidos a partir del original (este, para mí el mejor). A partir de él, han creado un conjunto de material adicional también muy bueno, como el de la foto (escrito en mayúsculas, lo que facilita mucho las cosas).
Y para terminar, dejadme que haga algo tan pesado como aconsejar: consumid cultura, id a las librerías, asistid a las actividades de las bibliotecas. O regamos el tejido cultural o tendremos ciudades secas.

2 comentarios:

Raúl dijo...

¡Qué buenas sugerencias! Regaré, si me lo aceptan, la planta que crece en la curiosidad de un sobrino "pegado"... ¡Muchas gracias!

Mikela dijo...

A propósito del riego al tejido cultural y de ciudades secas:
Mas futvol por fabor!

Publicar un comentario

Closed