En el siglo XV, el gran Enrique de Villena en la Glosa a la Carta al rey de Navarra por
su traducción de la Eneida (edición de Pedro Cátedra pág. 43) clasificaba así las formas
de estar en el mundo:
"prinçipalmente en el mundo son
doze maneras de estados, siquiere condiçiones de gentes, que son:
estado de príncipe,
estado de príncipe,
estado de prelado,
estado de cavallero,
estado de religioso,
estado de çibdadano,
estado de mercader,
estado de labrador,
estado de menestral [del lat. ministeriālis, empleado,
dependiente, quien tenía un oficio mecánico]
estado de maestro,
estado de discípulo,
estado de solitario,
estado de muger".
Estas son las etiquetas sociales que se podían separar en la Edad Media peninsular. ¿Cuál te
correspondería a ti? ¿En qué sentido persisten tales calificaciones o han perdido su sentido hoy? Deja tu comentario...
8 comentarios:
Discípulo aunque no estaría nada mal el estado de Príncipe :-)
Principe, fuí en mi juventud. Prelado, mucho, de familia.Caballero, siempre.Religioso,mucho, hace mucho.Ciudadano, siempre.Mercader, nunca. Labrador, mi bisabuelo. Menestral, para eso hay que tener muchas virtudes.Maestro,poco .Discípulo, mucho; hoy de latín.Solitario, va a ser la etiqueta definitiva.Mujer,ni por pìenso, pero les echo una "manito"
Qué bonito, Chus. Gracias
Creo que estos estados siguen vigentes hoy, Lola, aunque ahora los mercaderes en lugar de comerciar roban directamente aquello que pertenece a los ciudadanos.
Yo he sido labrador, menestral y siempre discípulo.
Un saludo
Estado de maestro ( por mi profesión ) y Estado de discípulo ( por mi eterna curiosidad )
varios de ellos. Cavallero, discípulo, maestro, solitario y çibdadano.
Creo que de esos, un poco de cada.
Afortunadamente, hoy suelen combinarse estas formas de estar en el mundo. Podemos ser maestros para algunas personas y al mismo tiempo sentirnos discípulos de otras...o ser maestros en algunas disciplinas y aprendices en otras. Yo soy mas o menos menestrala de mañana y completamente discípula de tarde. ¿Sería lectora un estado?
Isabel.
He sido menestrala, soy discípula, alguién me tomó por maestra, (cosa que agradezco y espero hacer bien), y asumo el de mujer para defender nuestro lugar en el mundo y reclamar la dignidad para aquellas a las que le han negado la voz.
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